“Me vuelvo una tigresa cuando tengo que serlo”

Tamani Bueno es la nueva miss Montero. A sus 17 años se muestra madura. Busca la corona departamental

Avatar de Cristian Massud Cristian Massud 17/10/2017

No se crio en cuna de oro. Era una más de esas niñas que jugaban a ser una reina de belleza. Aún lo recuerda. “Es como si fuera ayer”, dice y se pierde con la mirada. De eso hace ya mucho. Hoy Tamani Bueno Cuéllar tiene 17 años y, después de poner de su esfuerzo, se convirtió en la nueva miss Montero 2017. Está feliz.

Cuando estuvo en la competencia conoció cómo se ‘movían’ los medios, aprendió a posar ante una cámara y a hablar en la televisión. Le gustó. Ahora es reportera de un canal en su ciudad. Y quiere seguir creciendo.

Tiene una dieta rigurosa. Se cuida. Va al gimnasio regularmente y se está preparando intelectualmente para el casting del Miss Santa Cruz en los próximos meses. ¡Claro que sueña con la corona departamental! Y cuando la obtenga apuntará al Miss Bolivia.

Algunos expertos en belleza consideran que ella tiene todo para triunfar. Y eso Tamani lo sabe, pero no se confía. A veces es muy hiperactiva y no tiene paciencia. “Tengo que aprender a calmarme y esperar que las cosas sigan su curso”, reflexiona.

Cree que una corona no solo es sinónimo de belleza. Ese concepto debe romperse. Piensa que el título es un arma para apoyar a su gente y hacer ‘crecer’ su ciudad. Se dedicará a hacer beneficencia y a dejar una huella bien fuerte.

Cuando le molesta algo o alguien (que eso casi no sucede) se transforma en otra. “Me vuelvo una tigresa cuando tengo que serlo”, asegura.

Admira a Desirée Durán. “Ella soñó y consiguió llegar lejos. Si no soñás, no aspirás a nada. Yo estoy soñando”, indica. Y sabe que, una vez dentro del concurso, se le vendrá un torbellino de cosas, pero está dispuesta a lidiar con eso. Ya sabe que debe aprender a ser disciplinada, a maquillarse, a peinarse, a ser ‘siempre ella’, así se convertirá en una ‘gran’ reina.

Hoy se llama Montero, mañana quizás Santa Cruz y Bolivia. Por el momento se está preparando para después volar y volar. 

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